Soja texturizada: qué es, cómo se cocina, propiedades y receta de albóndigas de soja al horno

Se ha puesto tan de moda la soja texturizada que prácticamente todos los supermercados la venden. ¿Qué es realmente la soja texturizada? ¿Es tan buena para la salud como dicen? ¿Sirve para imitar a la carne? ¿Cómo debemos usarla para cocinar? He probado la soja texturizada de Mercadona y te cuento mi experiencia para resolver todas estas dudas. Y al final te doy la receta de unas albóndigas de soja texturizada al horno.

¿Qué es y cómo se obtiene?

La soja texturizada (también denominada carne de soja o proteína vegetal texturizada) es un producto deshidratado que se ha obtenido a partir de harina de soja fundamentalmente. Se puede obtener de diversas formas, en copos finos o gruesos, en trozos o cortezas, en tiras o en filetes, etc.

Esa "textura" de la soja viene de un proceso que se denomina extrusión. Hay varias formas de hacerlo, aquí pondré la idea básica para entenderlo:

A partir de las habas de soja, se extrae su aceite (que luego tras el refinado será el futuro aceite de soja). Tras esto, queda un residuo sólido que puede ser deshidratado para hacer la harina de soja. Esa harina se acondiciona con agua para formar una pasta.

Esta pasta de soja se hace pasar por un extrusor, es decir, una especie de tornillo en un cilindro que va ejerciendo una presión sobre la masa. Esta presión, que es muy alta, hace que la temperatura suba, llegando a alcanzar los 180ºC, lo cual hace que las proteínas de la soja cambien su estructura (se desnaturalizan por el calor) y transforma finalmente la textura de la pasta. El calor también "esteriliza" el producto.

Esa pasta texturizada pasa a presión por unos orificios y unas cuchillas lo cortan. Al pasar por ellos, el cambio de presión es tan alto que se evapora parte del agua de la pasta, quedando los típicos orificios de la soja texturizada. Luego el producto se termina de secar y queda listo para envasar y comercializar.

Propiedades nutricionales

La soja texturizada no es un producto nuevo, lleva ya muchos años en el mercado, esto lo saben muy bien las personas con alimentación vegana o vegetariana. Ahora parece que se ha puesto de moda o se ha dado más a conocer. Y con ello, vienen las preguntas de si es saludable, de si engorda, de si es buena o mala, de si tienen tantas propiedades como dicen...

A ver, no nos liemos, es soja, una legumbre.

El haba de soja natural es rica en proteínas de muy buena calidad, carbohidratos complejos, ácidos grasos poliinsaturados, vitaminas, minerales y gran cantidad de compuestos antioxidantes. Probablemente, sea la legumbre con el mejor perfil nutricional de todas.

La soja texturizada es un producto deshidratado y prácticamente desgrasado. Podemos decir, por tanto, que es un producto muy interesante desde el punto de visto nutricional, por ser bajo en grasa, bajo en sal y muy rico en proteínas y carbohidratos de calidad.

Por ejemplo, la de Mercadona, que es soja texturizada de gránulo fino, tiene un 50% de proteínas, un 30% de carbohidratos y un poquito de fibra. 

Yo la consideraría como una legumbre más, independientemente de que se use como sustituto o "análogo de carne". No es la panacea, no hace milagros... pero sí es un producto a tener en cuenta por sus propiedades nutricionales, y ya no solo para los que siguen una alimentación vegana o vegetariana, sino para la población en general.

No obstante, no hay que olvidar que debemos consumir más legumbres (garbanzos, lentejas, alubias...), lo digo por si tienes en la mente comer solamente la soja texturizada para cumplir el expediente...

Soja texturizada de Mercadona; 1,50€ el paquete

Cómo cocinar la soja texturizada

A partir de aquí comentaré mi experiencia con la soja texturizada que he probado: la de Mercadona. Para ver otros tipos y usos, puedes revisar el post de Gastronomía Vegana.

El producto seco a modo de copos, como si fueran cereales, viene en unos sobres de 250 g que cuestan 1.50€. En sus ingredientes se indica "soja texturizada 100%" (importante este detalle, que solo sea soja).

En las instrucciones nos indican que deben remojarse con agua durante 20 min y que se puede utilizar como sustituto de la carne en guisos, salsas y hamburguesas.

Mi experiencia:

>>> Remojo: parece que no, pero la soja texturizada absorbe bastante agua, se hincha mucho y, por tanto, aumenta casi el triple de volumen. Serían 20 min si se hace en agua fría; si se pone caliente, lógicamente será menor. También podemos ahorrarnos el remojo si la preparación que vayamos a hacer tiene caldo, ya que se hidratará sobre la marcha.

>>> Escurrido: la soja hidratada se pasa a un colador para retirar el exceso de agua y se presiona un poquito solamente, pero no la estrujes como veo en muchos vídeos de cocina, porque luego se quedará muy seca (por ejemplo en preparaciones tipo hamburguesas).

>>> Sabor: prueba un gránulo se soja hidratado y te darás cuenta que sabe a prácticamente a nada o más bien, a un sabor indescriptible. El sabor lo darán los ingredientes que lleve la preparación donde la usemos. No obstante, yo le di un salteado a la soja en una sartén con un poquito de aceite para tostarla.

Así queda la soja texturizada una vez hidratada, escurrida y ligeramente tostada en la sartén

>>> Cocinado: la he usado como si fuera carne en dos preparaciones, una boloñesa y unas albóndigas. La receta de la boloñesa de soja quedó muy rica y pronto estará en el blog. Dejo más abajo las indicaciones para hacer las albóndigas de soja.

En general, la soja texturizada me gustó. La verdad es que no la había probado nunca y para ser la primera vez, la experiencia fue muy buena. Sí es verdad que me desconcertaba un poco esa falta de sabor, pero luego el resultado final en las recetas fue muy interesante. El producto es barato y cunde mucho. Te recomiendo que le des una probadita y me cuentes.

¡Te dejo con la receta de las albóndigas de soja texturizada!

Una publicación compartida de el~saberculinario (blogger) (@elsaberculinario) el Ene 6, 2018 at 12:32 PST

Albóndigas de soja texturizada al horno

Ingredientes:

• 100 g de soja texturizada, previamente remojada, escurrida y tostada en la sartén
• 1 cucharadita de ajo en polvo
• 1 cucharadita de cebolla en polvo
• 1 cucharadita de orégano seco
• 1 manojo de perejil fresco
• 1 huevo
• 4 cucharadas de leche
• 1/2 cucharadita de chile en polvo
• 1/2 cucharadita de pimentón dulce
• Pan rallado en caso necesario
• Sal y pimienta negra al gusto

* para opciones veganas, omitir el huevo y sustituir la leche con bebida de soja


Preparación:

1. Mezclamos la soja texturizada (que ya le hemos remojado, escurrido y tostado) con todos los demás ingredientes. El pan rallado nos servirá para ajustar el espesor, aunque creo que no lo va a necesitar. Dejamos reposar la masa en la nevera unos 20 min.

2. Formamos las albóndigas y las vamos poniendo en la bandeja de horno previamente engrasada con aceite de oliva. Horneamos a 180 ºC con calor arriba y abajo. Iremos dándole la vuelta de vez en cuando. Estarán en unos 15-20 min.

3. Podemos comernos las albóndigas tal cual, con salsa de tomate, con mayonesa, ponerlas en una salsa con curry o de almendras, etc.

En vez de hornearlas, también sería buena opción ponerlas directamente en la salsa, como hice con la sopa de albóndigas, que quedaron genial.

Espero que te haya gustado el post y te animes a usar la soja texturizada. ¡No olvides contarme tu experiencia, sea buena o mala!

Cualquier pregunta, no dudes en dejarme un comentario aquí o en mi página de Facebook. ¡Hasta otra!

Tomás García Cayuela
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¡Hola, bienvenid@ a mi blog! Me llamo Tomás y soy Investigador en Ciencias de la Alimentación, Blogger Gastronómico y Social Media Manager. Aquí encontrarás mucha cocina, un poquito de ciencia y un muchito de cultura gastronómica. Recuerda, ¡saber más para comer mejor!

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