Mucho más que enoturismo y gastronomía en la Ruta del Vino de Rueda
http://www.elsaberculinario.com/2016/05/enoturismo-gastronomia-ruta-vino-rueda.html
La Ruta del Vino de Rueda continúa apostando por ofrecer experiencias únicas a sus visitantes en uno de los destinos enoturísticos más completos del país, porque no solo incluye vino y gastronomía, sino también turismo rural y cultural.
Qué es la Ruta del Vino de Rueda
La Ruta del Vino de Rueda, uno de los vinos más característicos de Castilla y León, se localiza en la provincia de Valladolid, colindando con Ávila y Segovia, y está integrada por 14 municipios y una mancomunidad, ofreciendo una gran riqueza turística e histórica.
Las condiciones climáticas y las características de sus suelos hacen de esta zona un lugar privilegiado para el cultivo de la vid, especialmente la uva autóctona Verdejo, que le confiere a sus vinos una gran personalidad.
Sus orígenes vitivinícolas se remontan al s.XI y esto hace que el vino y su entorno cobre un especial protagonismo, pero no hay que olvidar el reflejo que ha tenido sobre la cultura, las tradiciones y la gastronomía.
Por eso, la Ruta del Vino de Rueda es algo más que enoturismo y gastronomía,
Es una ruta joven, fresca, con una gran diversidad de oferta y adaptada para cada tipo de público, tanto para el especializado como para un público general que busca salir de la rutina y experimentar cosas nuevas.
Eso sí, hazla siempre acompañado. Como ocurre con el vino, se disfrutará mucho más.
Qué se puede hacer en la Ruta del Vino de Rueda
En primer lugar, puedes hacer un recorrido por todos los pueblos con encanto que forman la ruta, entre otras cosas porque están repletos de joyas patrimoniales, templos mudéjares, conventos, monasterios y hasta castillos, como el Castillo de la Mota en Medina del Campo, que nos remonta a la historia de Isabel La Católica.
Luego, puedes visitar las bodegas para ver el recorrido que va haciendo el vino. Y aquí puedes optar por dos alternativas: bodegas muy tradicionales, con galerías subterráneas (intactas desde la Edad Media), y bodegas modernas, más en la línea de la innovación. Lo interesante es ver ambas y comparar, ¿no te parece?
No podemos olvidar la gastronomía, uno de los grandes atractivos de la ruta que tienes que catar. Para mí, las recetas tradicionales son las mejores, como el lechazo asado, los garbanzos de Fuentesaúco y las elaboraciones con setas y hongos, así como los quesos, cuajadas o requesón. Deja sitio también para los postres caseros, ¡eh!
Podrás también visitar los comercios especializados y disfrutar de las enotecas, restaurantes y hoteles con actividades muy sugerentes, como un tratamiento de vinoterapia en un balneario.
¿Qué te han parecido estas propuestas enoturísticas? Como ves, hay mucho más que vino y gastronomía...
¡Espero que te sea útil toda esta información! Si tienes cualquier duda puedes visitar la web o redes sociales de la Ruta del Vino de Rueda
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¡Hola, bienvenid@ a mi blog! Me llamo Tomás y soy Investigador en Ciencias de la Alimentación, Blogger Gastronómico y Social Media Manager. En El Saber Culinario encontrarás mucha cocina, un poquito de ciencia y un muchito de cultura gastronómica. ¡Saber más para comer mejor!
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