Reduce el desperdicio de alimentos: 10 trucos para evitar tirar tanta comida a la basura

Desperdiciamos a diario mucha comida, que podría haber sido consumida o se podría haber reutilizado para otra cosa. Esto no puede ser habiendo tanta hambre por el mundo. ¿Qué medidas podemos tomar nosotros en casa entonces? Por lo pronto, presta atención a estas 10 pautas, seguro que juntos podemos actuar contra el desperdicio de alimentos.

Tenemos que ponernos firmes en esto, no puede ser que se desperdicien cerca de 1.300 millones de toneladas de alimentos al año, los suficientes como para alimentar a 2.000 millones de personas.

Nosotros en nuestras casas somos responsables del 42% de la comida que acaba en la basura, mientras que casi 1.000 millones de personas no tienen acceso a una nutrición suficiente.

El desperdicio de alimentos no es solo una cuestión ética, si no que también supone un impacto en nuestra economía (pérdida de dinero) y en el medio ambiente (enorme pérdida de recursos como aua, superficie agrícola y energía).

Por todo esto, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ha elaborado la Estrategia "Más Alimento, menos desperdicio", con objeto de desarrollar actuaciones con todos los agentes de la cadena alimentaria para reducir el desperdicio y la presión ambiental.

Para el ámbito doméstico está disponible la "Guía práctica para el consumidor: cómo reducir el desperdicio alimentario", con intención de que los consumidores cambien sus hábitos de compra y consumo y contribuyan a reducir los alimentos desechados.

10 trucos para reducir la cantidad de alimentos que desperdiciamos

1.  Planifica, planifica y planifica

No improvises. Planifica tu menú semanal y revisa la despensa y la nevera antes de comprar. Ya te dije en su momento que si planificas la compra, tu bolsillo y tu salud te lo agradecerán.

2. Haz la lista de la compra

La clave está en comprar solo lo que necesites, nada de tonterías y excesos (muchas veces compramos por comprar y luego se nos pone malo).

3. Organiza bien la nevera y la despensa

Tarea complicada pero posible. No dejes de leer las etiquetas y presta atención a las fechas de caducidad. ¡No sobrecargues la nevera!

4. Congela los alimentos para conservarlos mejor

Para tirar la menor cantidad de comida posible, congélala. No te olvides de poner una etiqueta con el nombre del plato y la fecha, así lo tendrás mejor controlado.

5. Distingue entre fecha de caducidad y fecha de consumo preferente

¡No te pongas a tirar los alimentos pasados de fecha así porque sí! Tienes que distinguir. La fecha de caducidad se aplica a productos perecederos como la carne o el pescado, de tal manera que si se pasa, puede ser peligroso para la salud. Sin embargo, si un producto está pasado de fecha de consumo preferente (galletas, pastas, conservas, etc) no hay riesgo para la salud, solo se podrían observar cambios en la textura o el sabor.

6. Consume primero lo más antiguo

Parece una obviedad, pero no hacemos caso. Luego se nos acaba poniendo malo y a la basura.

7. Ajusta el tamaño de las raciones

La mejor manera de evitar que sobre comida es cocinar las raciones que se van a consumir. Me da mucho coraje que se deje comida en el plato y que luego vaya a la basura. ¡No comas por los ojos!

8. Reutiliza las sobras para otros platos 

Si a pesar de ajustar las raciones, te sobra comida, conserva en el congelador o reutiliza de forma creativa para otra receta. ¡Aplica la filosofía del aprovechamiento para hacer croquetas!

9. Tira a la basura lo imposible de aprovechar

Exprime los alimentos al máximo y no te olvides de separar los residuos. Además, ahora se lleva mucho lo del tema de compostar, para así sacarle mayor provecho a los residuos orgánicos.

10. ¿Llevarte las sobras en el restaurante?

Aquí es en España no está instaurado, entre otras cosas porque está mal visto. Sin embargo, en otros países como en EE.UU. es habitual pedirle al camarero que te ponga la comida sobrante en una bolsa o en envase para llevar. La clave está en no pedir más de la cuenta y preguntar por el tamaño de las raciones.

 

No olvides aplicar siempre las 3R

A modo de resumen podemos decir que para reducir el desperdicio hay que aplicar las 3R:

REDUCE: compra de forma responsable y planificada.

REUTILIZA: las sobras de los alimentos no deben tirarse, hay muchas cosas que se pueden aprovechar con creatividad.

RECICLA: a la hora de tirar, deposita en la basura solo lo imposible de aprovechar

Y recuerda... ¡APROVECHAR ES DE SABIOS!

¡Espero que te haya gustado este post! Cualquier pregunta, no dudes en dejarme un comentario aquí o en mi página de Facebook.

¡Hasta otra!

Tomás García Cayuela
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¡Hola, bienvenid@ a mi blog! Me llamo Tomás y soy Investigador en Ciencias de la Alimentación, Blogger Gastronómico y Social Media Manager. Aquí encontrarás mucha cocina, un poquito de ciencia y un muchito de cultura gastronómica. Recuerda, ¡saber más para comer mejor!

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